Reseña MELLADO: SONY A7R
Como algunos sabéis empleo cámaras réflex Canon con lentes fijas y una Hasselblad H2D con respaldo Phase One P65+. Con esto cubro prácticamente todas mis necesidades, tanto para fotos dinámicas donde puedo necesitar además un ISO alto -la 1Dx es soberbia- como para tomas más tranquilas donde quiero la máxima calidad y resolución y empleo la Hasselblad + Phase One con trípode.
Pero a veces no quiero o no puedo ir cargando con tanto equipo, aunque puedo encontrarme -por mis frecuentes viajes- con la posibilidad de realizar alguna toma interesante para mi trabajo, y las compactas -con los sensores tan pequeños que emplean- no me sirven. La RX1 es una honrosa excepción que sólo me ha porporcionado satisfacciones y en muchas ocasiones ha superado mi capacidad de asombro.
Precisamente esa capacidad de la RX1 de dar una calidad extrema con un sensor completo y pasar totalmente desapercibida es lo que me hizo animarme a probar la Sony A7r, que como sabéis, monta un sensor de 36 MP -el mismo que el de la Nikon D800- pero en un cuerpo mucho más pequeño. Cuando Claudia me ve con esta cámara se burla despiadadamente de mí tachándome de «turistilla» y diciéndome que cómo puedo yo ir con eso, pero ésta es la gracia, que «parece» una cámara «mala», pasando completamente desapercibida y no resultando agresiva en absoluto.
Para comprobar si esta cámara me podía servir para viajes en los que no me quiero llevar el equipo pesado y aun así poder realizar un trabajo serio si fuera el caso, quise dotarla de las mejores lentes del mercado. Para ello compré dos lentes Leica Summicrom de 35mm y 50mm respectivamente. ¡No necesito más! Estas lentes, aparte de ser realmente pequeñas por su construcción optimizada y por el hecho de carecer de enfoque automático -que tampoco necesito- son las que dan mayor resolución en líneas/mm. Alrededor de 90-95 l/mm mientras que loas mejores lentes de otras marcas están alrededor de las 65-70l/mm. Por eso pensé que sería la mejor manera de sacarle todo el rendimiento al sensor de 36 MP de la A7r.
Por tanto compré un adaptador Voigtlander para las lentes Leica M y un adaptador Metabones para poder montar mis lentes de focal fija de Canon.
La prueba que os presento consiste en disparar en condiciones óptimas de luz con las siguientes lentes montadas en una Sony A7r y con diferentes diafragmas para poder apreciar los posibles problemas de viñeteado y de pérdida de nitidez en los extremos. He usado Lightroom 5 desactivando las correcciones automáticas de lente y el enfoque por defecto. He usado lentes fijas de Leica en 35 y 50mm con la mayor resolución en líneas por milímetro, el fantástico Sigma 35mm f/1.4 de la serie Art, los legendarios y renovados 50mm y 85mm f/1.2 de Canon y también, como extra, el nuevo 100mm macro. Para poder comparar las lentes fijas con los zooms he empleado el 24-70mm f/2.8 de Canon y el nuevo y sorprendente 24-70mm II f/2.8.
Éste no es un test riguroso y metódico como los que suele realizar mi apreciado Valentín Sama en su página DSLR MAGAZINE, sino mi forma personal de probar el equipo, para comprobar si cumple mis necesidades más exigentes, que a mí me resulta suficiente, y que comparto con vosotros. He disparado a mano -porque para eso quiero esta cámara- con buena luz y no subiendo de ISO 400. He empleado los diafragmas más abiertos para apreciar el viñeteado y la pérdida de nitidez en los extremos y he cerrado hasta f/5.6, donde todas estas lentes ya han alcanzado de sobra su «sweet spot» o punto dulce, donde entregan el máximo rendimiento. Aún tengo que analizarlas en detalle, pero mientras tanto he pensado que podía ser interesante compartirlas con vosotros.
- Leica Summicron-M ASPH 35mm f/2 a f/2.0
- Leica Summicron-M ASPH 35mm f/2 a f/2.8
- Leica Summicron-M ASPH 35mm f/2 a f/5.6
- Sigma 35mm f/1.4 DG HSM a f/1.4
- Sigma 35mm f/1.4 DG HSM a f/2.0
- Sigma 35mm f/1.4 DG HSM a f/2.8
- Sigma 35mm f/1.4 DG HSM a f/5.6
- Canon 24-70mm f/2.8 EF L I en 35mm a f/2.8
- Canon 24-70mm f/2.8 EF L I en 35mm a f/5.6
- Canon 24-70mm f/2.8 EF L II en 35mm a f/2.8
- Canon 24-70mm f/2.8 EF L II en 35mm a f/5.6
- Leica APO-Summicron-M 50mm f/2 ASPH a f/2.0
- Leica APO-Summicron-M 50mm f/2 ASPH a f/2.8
- Leica APO-Summicron-M 50mm f/2 ASPH a f/5.6
- Canon EF 50mm f/1.2L USM a f/1.2
- Canon EF 50mm f/1.2L USM a f/2.0
- Canon EF 50mm f/1.2L USM a f/2.8
- Canon EF 50mm f/1.2L USM a f/5.6
- Canon 24-70mm f/2.8 EF L I en 50mm a f/2.8
- Canon 24-70mm f/2.8 EF L I en 50mm a f/5.6
- Canon 24-70mm f/2.8 EF L II en 50mm a f/2.8
- Canon 24-70mm f/2.8 EF L II en 50mm a f/5.6
- Canon EF 85mm f/1.2L II USM a f/1.2
- Canon EF 85mm f/1.2L II USM a f/2.0
- Canon EF 85mm f/1.2L II USM a f/2.8
- Canon EF 85mm f/1.2L II USM a f/5.6
- Canon EF 100mm f/2.8L Macro IS USM a f/2.8
- Canon EF 100mm f/2.8L Macro IS USM a f/5.6
Mi propósito al hacer estas pruebas es dilucidar las siguientes cuestiones:
- ¿Realmente las lentes Leica dan mejor resultado que las mejores lentes de Sigma o Canon?
- ¿Son los zoom clásicos incapaces -como siempre proclamo- de resolver resoluciones de sensor tan altas?
- ¿Es el nuevo zoom Canon 24-70mm f/2.8 EF L II junto con el Tamron 24-70mm f/2.8 VC-USD las primeras lentes zoom capaces de resolver más de 16 MP?
- Y la pregunta más importante, y la razón de todo este test: ¿Puedo usar una cámara ligera y discreta como la Sony A7r para realizar mi trabajo de gran formato con la calidad que exijo?
En este link tenéis todas las imágenes grabadas en JPEG de calidad 10 y sin enfocar ni corregir aberraciones ni viñeteados. Podéis descargarlas todas a la vez pinchando en el botón con los tres puntos suspensivos y eligiendo la opción «Descargar comp ZIP».
Conclusiones previas:
A primera vista, y como indicaba anteriormente sin analizar en detalle las imágenes, éstas son mis primeras impresiones:
- No existen lentes tan pequeñas como las Leica y que den tantísima calidad. Las lentes Zeiss que monta Sony tienen muy buena calidad pero no llegan al nivel de las Leica, y eso también se nota en el precio. Pero tras analizar las esquinas en las pruebas realizadas me he dado cuenta que he de desistir de usar las lentes Leica ya que se aprecia una gravísima pérdida de nitidez en las esquinas debido al uso de adaptadores, y da igual la marca, ya sea el Metabones, Voigtlander o Novoflex. Esa degradación se aprecia sobre todo en los gran angulares de Leica y menos en el 50mm.
- EL Sigma Art 35mm es sin duda uno de los mejores 35mm para cámaras réflex del mercado. Superior al Zeiss 35mm f/1.4, que tuve ocasión de comparar con el Sigma y… devolver. El Canon 35mm f/1.4 se queda bastante atrás comparado con estas dos lentes. Es sorprendente que 800 € den tanto de sí.
- El nuevo zoom 24-70 de Canon ha cambiado en parte mi opinión sobre los zooms. Esta lente da un rendimiento impresionante -incluso a f/2.8 y en las esquinas- y es válido para uso con sensores de alta resolución. La comparación con el antiguo 24-70mm de Canon evidencia que están a años luz uno del otro. El incremento de precio se justifica dada la gran diferencia. Lo que no cambia en los zooms es el peso, así que aun siendo una lente magnífica, sigo abogando por las lentes fijas, aunque ésta ya sí se puede usar con sensores de alta resolución.
Conclusiones finales:
Despues de realizar algunas pruebas más con las lentes originales de Sony he llegado a las siguientes conclusiones:
La Sony A7 es una cámara más amigable que la A7R ya que tiene menos restricciones de uso. 24 MP son más que suficientes para la mayoría. Yo tengo copias de 110x150cm con una Canon de 21 MP y el resultado es fantástico. Hay que plantearse si queremos realmente más tamaño. La A7R con 36 MP sólo la recomendaría a quienes necesiten capturas con el máximo detalle porque hagan copias grandes. Los inconveneintes respecto a la A7 son:
- Obturador completamente mecánico que puede favorecer la trepidación en ciertos rangos de velocidades de obturación,
- Píxel más pequeño en la A7R por lo que el límite de difracción es f/8 mientras que en la A7 es f/11.
- Tener un píxel más pequeño también limita la sensibilidad máxima aceptable de disparo ya que genera más ruido. Para mi gusto los límites serían ISO 3200 en la A7 e ISO 1600 en la A7R.
- La mayor resolución también lleva implícita la necesidad de disparar a velocidades más altas de las habituales si queremos conseguir la máxima nitidez. En este sentido la regla de toda la vida que dice que podemos disparar a 1/longitud focal, no se cumple. Es decir, si monto un 50mm en la A7 puedo disparar a 1/50s mientras que en la A7R debo irme a 1/200s.
En cuanto a las lentes he realizado diversas pruebas usando una A7Rque están accesibles en esta nota.
Mis conclusiones a es respecto son las siguientes:
- No merece la pena hoy por hoy invertir en lentes Leica o Voigtlander, sobre todo de longitud focal menor a 50mm, para usar con esta cámara ya que los adaptadores existentes en el mercado (he probado el propio de Voigtlander y el de Metabones) propician una inaceptable pérdida de nitidez en los extremos a aberturas inferiores a f/5,6. Una pena y una gran decepción…
- Las lentes de Canon sí dan muy buen resultado en cuanto a calidad incluso a diafragmas abiertos con el adaptador de Metabones, que por cierto cuesta casi 500 €. Pero de nuevo la utilidad práctica se ve gravemente mermada por el hecho de que el enfoque se vuelve extremadamente lento, inservible. Al menos Metabones lo avisa muy claramente. Aun así la calidad del 35mm de Sigma serie Art y el nuevo 24-70mm II de Canon montados con este adaptador de Metabones, es fantástica.
- Ante este panorama la mejor manera de obtener todo el rendimiento de una A7R es olvidarnos de adaptadores y emplear las lentes específicas de montura E. El problema es que hay muy pocas todavía y la calidad es bastante irregular. El Sony 24-70mm f/4 de Zeiss es bastante mediocre. El 35mm f/2.8 también de Zeiss es sólo regular, estando por debajo del Sigma 35mm f/1,4 Art montado con adaptador en la A7R sobre todo a diafragmas abiertos. En cambio el Sony 55mm f/1,8 de Zeiss es una auténtica maravilla, completamente recomendable y entre las mejores del mercado según DxO. Encontraréis más información en el siguiente link. Al final es la única lente que tengo a la espera de que aparezcan otras nuevas.
José María Mellado. 15-06-2014, Madrid